La Fundación Tradiciones Mayas aumenta el acceso a la medicina y la curación tradicionales mayas colaborando con el sistema sanitario público e integrando la medicina tradicional con el método occidental.
Contexto
La Fundación Tradiciones Mayas empezó como una fundación que empoderaba a las mujeres mayas de Guatemala, utilizando el patrimonio y el arte tradicionales y trabajando con un modelo de comercio justo. A medida que la Fundación ha ido creciendo, han invertido en divulgación y ayuda social para ofrecer más oportunidades a las mujeres indígenas y sus familias a través de programas comunitarios.
La medicina es una parte importante de la cultura maya. En las comunidades rurales, la medicina tradicional es mucho más económica y accesible. Sin embargo, los Ajq'omanela, los curanderos tradicionales mayas, han sido excluidos de la esfera de la salud pública en Guatemala. Esto ha provocado un aumento del número de personas que sufren.
La Organización Mundial de la Salud ha afirmado que Guatemala se enfrenta a una serie de retos fundamentales, entre ellos: 'la necesidad de reducir las desigualdades y fomentar una mayor participación de los responsables de la toma de decisiones, empoderando así a la población para ejercer su derecho a la salud' y 'la necesidad de desarrollar un enfoque integrado de los determinantes políticos, económicos y sociales de la salud... garantizando la equidad sanitaria y el derecho a la salud.'
El sistema sanitario de Guatemala se creó durante la guerra civil que duró desde 1954 hasta mediados de los años 80. La sanidad pasó a ser responsabilidad del gobierno democrático una vez terminada la guerra, pero la salud del país sigue dependiendo de la ayuda de las ONG, ya que el gasto es muy bajo per cápita.
por qué esto importa
Aunque el sistema sanitario guatemalteco promete a todos los habitantes del país acceso gratuito, la realidad es que en algunas comunidades rurales puede ser muy difícil visitar a un médico, debido a los limitados recursos y a los problemas de acceso.
Los mayas son los que más sufren de toda la población debido a las barreras lingüísticas, la extrema pobreza, las condiciones de vida y la dieta. Los mayas pueden vivir 10 o 15 años menos que el resto de guatemaltecos. Con el 91% de los mayas luchando por satisfacer incluso las necesidades básicas, el acceso a la asistencia sanitaria y a la planificación familiar puede convertirse en un gran problema para las familias mayas. La desnutrición crónica y la mortalidad materna afectan gravemente a la población indígena. Los médicos en Guatemala hablan principalmente español, de modo que los que hablan las lenguas tradicionales mayas no pueden comunicarse eficazmente con sus médicos.
Guatemala ha sufrido recientemente una sequía extrema debido al fenómeno de El Niño. Casi la mitad de los niños guatemaltecos están desnutridos, la cuarta tasa más alta del mundo.
Estamos muy contentos de que Tradiciones Mayas apoye a las comadronas locales para que amplíen sus conocimientos sobre la planificación familiar
Evelyn Roquel, Promotora de Planificación Familiar, WINGSLas prácticas sanitarias tradicionales mayas, trabajando en armonía con la medicina occidental, podrían contribuir a mejorar la salud pública de toda la nación guatemalteca, ayudando a dar acceso a la atención sanitaria a todos, ya sea la población nativa o la no indígena.
Onaway apoyó a la Fundación Tradiciones Mayas en su Proyecto de Salud Comunitaria, impulsando los intentos de la Fundación por preservar y promover las medicinas y conocimientos tradicionales mayas, e integrarlos en la red de salud pública.
el resultado
La Fundación Tradiciones Mayas ayudó a crear espacios en las comunidades de Sololá, una zona rural de Guatemala, para la medicina maya, incluyendo la difusión de conocimientos, la realización de tratamientos y el uso de plantas medicinales. Se crearon cinco clínicas en la zona, cuatro de ellas en centros de salud locales, que reunían los servicios de salud pública y la medicina tradicional. Se organizaron talleres en las zonas rurales para dar a conocer la medicina maya y las plantas medicinales, y se distribuyeron manuales sobre plantas medicinales a 200 clínicas y estudiantes.
La Fundación también ha colaborado con WINGS, una organización centrada en los derechos reproductivos, para ayudar a formar a las comadronas en materia de salud sexual y planificación familiar, aliviando así parte de la presión sobre las familias del país.
Aunque la misión principal del Programa de Salud Comunitaria era preservar y promover la medicina tradicional maya y el uso de plantas medicinales mediante la colaboración con una asociación local de Ajq'omanela, al ser la desnutrición un problema tan grave en el país, la Fundación ha optado por centrar y formar a sus curanderos más en el ámbito de la nutrición para que puedan defender esta necesidad en sus comunidades.